Como les había comentado la semana pasada, aprovechando el viaje a CDMX le quise dar el beneficio de la duda a la ya conocida Nicolle Stevinshon aventurandome y/o arriesgandome a pagar su servicio completo que consta de 1500 pesos.
Primero que nada, yo decidí instalarme en el hotel Andrade que es en la Doctores porque en viajes anteriores a la CDMX algunas chicas me han citado ahí, entonces decidí hospedarme ahí pensando en ahorrarme lo del motel.
El pasado viernes alrededor de las 5 de la tarde le llamo a Nicolle para acordar el encuentro, me da el precio (1500) por hora, me dice que su servicio consta de ser activa o pasiva, penetración con condón y sexo oral con condón; eso sí, si tu como cliente le quieres dar sexo oral sin condón ella no te lo prohíbe según me dijo en la llamada. Me dijo que su verga es de 19 cm y que no tiene restricción de besos. Acorde con ella de vernos en mi hotel a las 10 de la noche y que me llamará o me mandara mensaje cuando estuviera en el lobby para bajar por ella (por seguridad no les doy mi número de habitación)
Para no hacérselas más larga, la vieja no llego. Se fueron las 10 y no llegaba, pasaron 15 minutos y baje al lobby a ver si se veía, para las 10 con 40 minutos le mando mensaje para preguntarle porque aún no llegaba y a los 10 minutos de enviar ese mensaje me responde diciendo que su hijo se le había puesto mal y que por eso no podría acudir a la cita.
Pero honestamente que bueno que no fue a la cita porque lo que no gaste con esta vieja lo gaste ayer con Mónica Chávez que casualmente también esta aquí en CDMX y es mi transexual favorita y a quien le había tenido un chingo de ganas desde hace tiempo y se me había negado hasta que por fin cumplí mi sueño con ella, pero esa es otra historia que ya les contare en la sección de experiencias.